Generalmente se tiene como idea preconcebida que los moteros o motociclistas son personas peligrosas, oscuras, violentas, pero en este caso no es para nada eso.
El grupo se formó a principios del año en curso con dos miembros, de allí a la actualidad son más de 10, cada uno son su esposa demostrando que los moteros pueden tener vidas honorables y de ejemplo.
Sus acostumbradas rodadas, son viajes y actividades en las que todos en conjunto entregan comida, medicinas, juguetes, ropa, entre otras cosas, pero lo más importante, la palabra de Dios y Las Buenas Nuevas de Salvación, a personas en situación precaria o instituciones que se encarguen de estás personas.
A pesar de ser un grupo Cristiano y regido firmemente bajo ideales basados en la palabra de Dios, si tienen similitudes con los demás grupos existentes en la ciudad, como su estructura jerárquica, Presidente, Vicepresidente, Secretario, Tesorero, Vocero, entre otros, así como el lema de la hermandad Motera, Honor, Virtud y Lealtad.
Como tal son una familia, una hermandad, en la cual se apoyan y ayudan entre si aunque no se conozcan, también buscando sumar miembros al grupo, sin importar que no sean cristianos o incluso que no posean motocicleta, ya que su principal misión es predicar el Evangelio de Jesucristo a todos aquellos con quienes puedan.
Texto: Luis Morales
